LOS CELOS
Los celos comienzan cuando alguno de ellos se siente
excluido o tienen el temor de ser excluido. Entonces se generan los conflictos.
Cuando de niño sentimos que aparece papá entrometido en
la relación madre-hijo/a y que nuestra
madre ya no tiene la mirada solamente para nosotros, entonces sentimos
celos. Y "estos sentimientos de celos se prolongarán en nuestra vida
diaria". Luego,
"con nuestra pareja tendremos
sentimientos naturales de
celos". Por eso, una persona es celosa porque ama a su pareja,
queriendo apropiarse de ella.
Los celos son
parte de la constitución de nuestra personalidad y persistirá por siempre con
nosotros.
Ø "Sin celos no hay
deseos ni otro para amar".
Ø "Gracias a una tercera
persona, permitiré diferenciar a mi pareja, pero esto generará rivalidad y automáticamente aparecen los celos".
Los celos son como los miedos, incluso pueden ser patológicos, pues la
persona celosa se siente en inferioridad de condiciones en relación con la
tercera persona, entonces cree que hay
otra/o que puede ser más satisfactoria para su pareja.
Piensa que la otra persona tiene más recursos que ella. Pero,
eso es nada más que su inseguridad, la
persona celosa no se tiene confianza a sí misma, no se siente valorada, esto es porque sobrevalora al rival, cree que la otra vale más que ella,
y se siente menos. Sin embargo; el verdadero amor en una pareja, es cuando se
acepta que el otro sea todo tal como es. Y cuando en una relación amorosa se es invadido por
los celos, ésto empobrece a la pareja.
Mientras que en el amor pasional es distinto, aquí no quiero que mi pareja sea todo para mí, sino que yo
quiero ser todo para él. Y poder
asimismo encontrar todo lo necesario
en él.
Se tienen estos celos porque la pareja es vista como si
fuera de nuestra propiedad,
queremos someter, nos volvemos posesivos, no le damos lugar para que viva con su independencia.
Hay que tener en cuenta que en el amor, la relación amorosa implica el
bienestar de nosotros y de la
pareja, debemos de cuidar de su sus realizaciones, su bienestar, respetar
de sus decisiones y su necesidades, es decir su individualidad.
Si una persona ama a otra, debería de fomentar y ayudar
el desarrollo de sus potencialidades;
para trabajar, estudiar, de relacionarse con sus amistades y compañeros de
trabajo, familiares, vecinos, para practicar algún deporte. Etc.
Para todas estas cosas es necesaria la independencia y la
libertad de la persona que amamos, pues
esto posibilita que enriquezca las
experiencias personales y de la pareja.
Son distintos los
celos de los hombres al de las mujeres.
El hombre se siente vejado sexualmente por un acto
de infidelidad de su pareja, con reacciones torpes y violentas en algunos
casos, por eso no siempre exterioriza
sus celos como las mujeres.
En cambio la mujer, las manifiesta abiertamente. Las
exteriorizaciones son de cualquier
manera que los hombres lo notarían inmediatamente.
Angel Quispe Lima.